Burberry advierte que podría no cumplir sus objetivos de crecimiento debido a la desaceleración del gasto en lujo.
En la industria de la moda aveces estas arriba y otras abajo, con los cambios en las estrategias y la crisis financiera post-pandémica las marcas de lujo se han visto en un reciente desafío- ese es el caso de la Burberry. Burberry es la última empresa afectada por la desaceleración mundial del gasto en lujo, y advierte que es posible que no pueda cumplir su pronóstico original de un crecimiento de ingresos para el año fiscal 2024.
La compañía británica de lujo reportó ventas de £1,4 mil millones de libras durante las 26 semanas que terminaron el 30 de septiembre de 2023, un 7% más que el año anterior, pero experimentó una desaceleración en el crecimiento de las ventas en tiendas comparables en el segundo trimestre al 1%, en comparación con el 18% de hace tres meses.
Las operaciones del primer trimestre se vieron impulsadas por China, que sigue siendo el mercado más grande de Burberry (que representa hasta el 30% de las ventas, según la marca).
En un comunicado, el director ejecutivo Jonathan Akeroyd reconoció que "el entorno macroeconómico se ha vuelto más desafiante recientemente", pero dijo que la marca estaba logrando "buenos avances en sus objetivos estratégicos" y estaba "ejecutando sus prioridades a buen ritmo".
Mientras Lee se ha centrado en revitalizar los códigos y la oferta de la marca principal, Burberry ha seguido invirtiendo en transformar sus tiendas a nivel mundial, con otras 33 tiendas renovadas abiertas en el semestre, incluidas New Bond Street en Londres, Rodeo Drive en Los Ángeles Ángeles y Omotesando en Tokio. "Estamos en los primeros días, pero nos estamos adaptando y ajustando, y confiamos en que haremos todos los cambios necesarios", dijo Akeroyd.
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