“Todo somos LGTBIQ+, pero el mundo hace lo que puede para enderezarnos”
El que fuese Wally West en el Universo de The Flash y el amor encontrado de Simon Spier en Love, Simon, nos habla sobre como se ha sentido al formar parte del colectivo LGTBIQ+, de sus inicios y de activismo ecológico. Keiynan Lonsdale, el artista con mayúsculas que pretende hacerse un hueco en la música mientras sigue en la escena televisiva. El dragón con ansias de libertad que quiere volar más allá de cualquier frontera.
RAINBOW BOY
“Para componer suelo inspirarme en experiencias personales presentes o pasadas, pero también en el futuro”
¿Cómo empezó tu carrera?
Empecé a actuar en el escenario como bailarín. Me encantaba. Quería contar una historia y la música siempre me hablaba junto a las letras y los sonidos.
¿Te consideras bailarín, cantante o actor?
Me considero un artista e intérprete. Soy el compendio de todas esas cosas. En el escenario es realmente donde brillo más. Donde me siento más yo es en la unión de actuar, cantar y bailar.
¿Es difícil combinar la música y la actuación?
Solía pensar que sí. Ahora, cuando hago música y vídeos musicales, me doy cuenta de que estoy haciendo cortometrajes. Todo se aúna.
Cuando te sientas a componer, ¿escribes sobre experiencias personales?
Normalmente, sí. Suelo inspirarme en experiencias personales presentes o pasadas, pero a veces me encuentro con que escribo sobre experiencias futuras, y no es hasta años después cuando me doy cuenta de lo que escribí.
¿Cómo es ser un superhéroe?
Es muy surrealista. He sido una persona muy afortunada al poder participar en la serie The Flash y en todo su universo.
¿Cuáles son tus referentes?
Michael Jackson es mi mayor inspiración.
¿Y cuál es tu mayor objetivo?
Ir de gira con mi música y llevar mi show a todo el mundo mostrando mucho baile y una narrativa que hable a la gente. Que conecte con el público y de este modo seguir creciendo como músico. He estado soñando con esto desde que era un niño.
¿Cómo es Rainbow Boy?
Es muy guay. Está en constante evolución. Han pasado años y se ha ido expandiendo hacia lo que pensé que solo sería un álbum. Ahora se ha convertido en una obra que consiste en cortometrajes para cada una de estas canciones, que cobrará vida en el escenario. Rainbow Boy sigue creciendo, es como si hubiera una parte de mí cuando lo construí que necesitaba hacer las paces con ese niño que habitaba en mí. Estar en paz con las cosas que tenía que afrontar, pero también celebrar el hecho de que podía continuar con ese espíritu por el resto de mi vida. Viendo el mundo en esos ojos.
KEIYNAN EN ESTADO PURO
“La masculinidad es tomarse el tiempo para honrar la divina feminidad”
¿La fama te crea ansiedad?
Muchas veces. No me gusta la gente que opina sobre tus elecciones de vida sin tener el contexto de quién eres.
¿Alguna vez has querido desaparecer?
Cuando era pequeño quería ser invisible. Quería ser invisible hasta que me subiera al escenario. Así que le dije a mi madre: quiero subir al escenario, pero no quiero que nadie me mire ni antes ni después.
¿Cuándo te sientes solo?
Cuando olvido que tengo tantas personas increíbles en mi vida. Ha habido muchas veces que me he sentido solo en estos años porque me había distanciado de mis amigos y mi familia. Me había dicho a mí mismo que no me entendían. Ahora he llegado a un punto en el que pienso: "Bueno, la mayoría de la gente no entiende mi vida. Eso está bien. No necesito que lo entiendan. Simplemente me gusta pasar tiempo con esa gente”.
¿Por qué crees que la gente no entiende tu vida?
Porque la gente ve lo que ve. Tengo un trabajo en la que la gente ve los resultados finales de las cosas, y a veces puedo compartir pequeños fragmentos del proceso, pero a menos que estés en él, trabajando en el vientre de la bestia, no tienes ni idea, especialmente cuando ves una gran cantidad de la ostentación y el glamour del producto final.
Responde a la gente que no entiende cómo es Keiynan.
Es un dragón envuelto de arco iris que expulsa fuego por la boca y dispara bombas de agua a través del cielo desde la mañana a la noche. Un dragón que juega con todas las criaturas, canta, baila y come chocolate.
¿Hay alguna causa social en el que sientas que debes participar?
Sí, en el activismo queer. Siempre estaré involucrado en ello. Pero me gustaría sumergirme un poco más en proyectos y propósitos de conciencia ambiental, quiero entender mejor la tierra. Quiero entender la vida ecológica y el cómo poder vivir de forma más sostenible.
¿Sufres el racismo en la industria?
Por supuesto. Es parte de nuestro mundo, así que es una parte de nuestra industria. Sí, está ahí.
¿Cómo te sentiste cuando revelaste que perteneces a la comunidad LGTBIQ+? ¿Tenías miedo al rechazo?
Al principio, cuando me di cuenta no quería esto. Y cuando me acepté, me sentí realmente fortalecido por el apoyo. Me siento como si fuera algo normal, la vida normal. Mi opinión personal es que todos somos LGTBIQ+, pero el mundo hace lo que puede para “enderezarnos”. Tuve miedo al rechazo y a no poder triunfar en la industria. Tenía miedo de no ser aceptado por el público.
¿Qué es la masculinidad para ti?
La masculinidad es tomarse el tiempo para honrar la divina feminidad. Creo que es permanecer abierto y es tomar la iniciativa de liderar con valor y enfrentar tus miedos.
¿Qué le dirías a esa gente que critica la feminidad en los hombres?
Que se miren en el espejo.
¿Te preocupa tu aspecto físico?
Mis objetivos consisten en sentirme grande por dentro. Siento que he crecido mucho internamente, así que ahora me gusta que mi cuerpo refleje ese crecimiento. Tuve mucho acné mientras crecía, así que a veces puedo preocuparme un poco como se ve mi piel. También cambio mucho de pelo y eso me encanta.
¿Qué piensas de la salud mental?
Es algo esencial en lo que hay que adentrarse para sanar y entender el porqué de nuestros problemas.
¿Cómo reacciona la sociedad actual ante el abuso sexual de los hombres?
No creo que hayamos reaccionado muy bien a esto. Creo que todavía lo estamos descubriendo, y hemos tenido estos movimientos como #metoo que han salido a la superficie y han causado muchos cambios en nuestras industrias y, con suerte, en las calles y en todas partes.
¿Hay una cultura de la violación en las altas esferas del poder?
Hay una cultura del poder en las altas esferas del poder, y la gente puede abusar de ese poder de muchas maneras. Cuando los humanos no usan responsablemente su poder, se destruyen a ellos mismos y a otras personas. Siempre me gusta citar esta frase Jimi Hendrix: “Cuando el poder del amor sobrepase el amor al poder, el mundo conocerá la paz”.
¿Qué opinas de la cultura de cancelación?
No la entiendo. Me gusta que la gente tenga voz, pero en términos de política de cancelación… ¡cómo puedo opinar si no sé qué demonios pasó! ¿Quién soy yo para cancelar a una persona?
No somos jueces…
No, no estuvimos allí, no lo sabemos. A veces se necesita el poder de la gente para hacer un cambio realmente grande, pero hay una diferencia entre los movimientos y la cultura de cancelación.
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