“Necesitamos la terapia para construirnos”
Hemos podido ver a Dalila, el alter ego de María José Márquez Suárez, en el pasado Sónar en el Sonarpark by DICE y nos hemos enamorado de ella. Su música ha conseguido trasladarnos a un trance emocional vital y hemos querido poder conocer más las raíces de su arte. Tras más de 20 minutos de conversación hemos conocido a una mujer con las ideas muy claras que quiera de romper con las barreras del clubbing y que sueña con la rave perfecta. La abogada de día que quiere ser la reina de la electrónica en la noche. Paso a paso para llegar al éxito.
¿METIDA EN EL FANGO?
“No soporto las verdades absolutas ni a la gente que alecciona”
¿Quién es Dalila?
Me cuesta definirme, pero diría que soy pues una chavala de pueblo que le gusta mucho la música.
¿Cuándo supiste que te querías dedicar a la música?
Es una cosa que no estaba en mis planes. Ha surgido así, pero es verdad que desde bien pequeña he tenido mucha relación con la música. Aunque nunca pensé que pudiese llegar a dedicarme a la música. Empezó como un hobby y me ha llevado a este punto.
¿Cómo describirías tu música?
Me gustan mucho los sonidos preciosistas y lindos. Mi background musical siempre lo intento trasladar a mis proyectos. Me gustan las melodías, las voces corales y celestiales.
¿Cómo sería la rave perfecta?
Sería una cosa con mucho fango, con mucha colectividad y comunidad.
¿Quiénes son tus referentes?
Mis primeros referentes y lo que siempre he escuchado en mi casa ha sido la copla y el flamenco. Soy muy fan de los hermanos Reyes. El primer referente que tuve digamos a nivel local fueron Ana Ramírez que es una chica de Albacete que lleva muchísimo tiempo haciendo las cosas estupendamente y que la adoro.
¿Cómo ves la industria de la música?
Todo va muy rápido todo, pero lo llevó bastante bien gracias a mi entorno. Hablamos mucho de las cosas que pasan. En cierto modo nos hacemos terapias mutuas, nos contamos cuando nos hemos sentido mal, si nos han tratado mal… Tienes que estar mínimamente con la cabeza amueblada para que no te afecte, porque es todo como muy convulso.
¿Te ha tratado mal?
Cuando estás empezando y no tienes el estatus de artista consolidada hay un trato más precario.
¿Hay machismo dentro de del mundo clubbing?
Si te dijese que no sería mentira porque está presente en todos los estratos de la sociedad. En mi trayectoria me he podido encontrar situaciones de machismo, pero no han sido mayoritarias. Tengo líneas rojas. A mí no me apetece si una persona tiene comportamientos machistas, pues si hiciese una fiesta no lo bookearía. Me sería bastante complicado compartir espacios con alguien abiertamente machista o que tenga actitudes o se le haya señalado en algún momento.
¿Cómo eres? Dime tres adjetivos que te definan.
Soy muy familiar. Soy muy inquieta y muy creativa.
¿Qué te gusta hacer cuando nadie te ve?
Bailar muchísimo, de hecho, doy clases de baile. Soy muy sentida con el baile.
¿Qué te gustaría decir en las generaciones que están por venir?
Que hay que ser personas empáticas y comprensivas. Necesitamos la terapia para construirnos, hay que desaprender actitudes y detectando las cosas que están mal. Ser buena persona te lleva a buenos sitios.
¿Qué te hace feliz?
Ir a mi casa del pueblo con mi perro y con mi familia.
¿Qué no volverías a hacer nunca?
El ser tan complaciente. Muchas veces he hecho cosas porque era como lo que se esperaba de mí y aprender a decir más veces que no. Si no me siento cómoda también manifestarlo.
Algo que no soportas.
No soporto las verdades absolutas ni a la gente que alecciona.
Algo que te guste y te dé vergüenza reconocer.
La Isla de las tentaciones.
¿Cuál es tu mantra?
“Confía, tía, confía”. Siempre me repito cuando estoy insegura o tengo ansiedad. Luego también hay una frase, que siempre me ha marcado que me gustaba mucho de pequeña, que nos la decía el padre de mi mejor amiga cuando íbamos a salir de fiesta que era: “Vista larga, paso corto y mala leche”.
¿Qué es para ti la fama?
Es muy random, volátil y azaroso. Voy a suscribir a Rosalía… Es mal amante la fama.
¿Fama o dinero?
La precariedad es dura. Prefiero vivir bien y tranquila sin mirar la cuenta corriente porque te llegan cosas que necesitas para vivir sí o sí.
¿Te consideras libre?
A ver teniendo en cuenta en la sociedad que vivimos en el sistema que vivimos obviamente esto va a aparecer como una obviedad porque lo es nadie es libre a la hora de elegir. Estamos limitados. Estamos coartados en cierta medida.
¿Hay algún activismo en el que te gustaría verte involucrada?
Hay bastantes. Me gustaría implicarme más o mojarme más en ciertas. Siempre he intentado hacer mi microactivismo ayudando a personas que no tienen recursos para acceder a la justicia.
Si ahora mismo te diría es un altavoz enorme para hablar a todo el planeta, ¿qué dirías en una frase?
Que la gente se quiera bien todo el rato y el mundo iría muchísimo mejor.
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