Olivier Rousteing de Balmain se inspiró en los sapeurs, cuyos elegantes armarios mezclaban sastrería francesa con vívidos estampados africanos bajo los estrictos diez mandamientos de la Société des Ambianceurs et des Personnes Elégantes.
Desde la década de 1960, el tropo de estilo caleidoscópico ha dominado las calles de Kinshasa, París y Harlem, y ahora se ha convertido en el último descriptor de la ropa masculina de Balmain.
Balmain colaboró con Prince Gyasi, un artista visual ghanés y los ojos detrás de la campaña Petit-Prince Fall 2022 de la Casa. En la práctica, Rousteing seleccionó una serie de "obras maestras hipercromáticas" que Gyasi filmó en Accra, Ghana, de donde es, y reinventó sus coloridas imágenes en una gran cantidad de conjuntos formales.
"Cuando Olivier me llamó para proponerme trabajar juntos en esta colaboración, no hubo absolutamente ninguna necesidad de pensarlo", dijo Gyasi en un comunicado. "Inmediatamente estuve a bordo. A partir de nuestras muchas conversaciones a lo largo de los años, me he dado cuenta de que Olivier y yo compartimos una conexión profunda y una visión común. Quizás eso se deba en última instancia al hecho de que, sin importar cuán exitosos seamos en última instancia, tanto Olivier como yo parecemos destinados a seguir siendo siempre extraños”.
El Balmain de Rousteing no para de sorprendernos y nos deja con ganas de más. Aunque también es verdad que hay reminiscencias de lo último de la maison Schiaparelli en algunos de sus diseños. ¿Inspiración? Puede que algo más.
Comments